Gobierno evalúa nuevas fórmulas tras desacuerdo entre trabajadores y empresarios sobre salario mínimo 2026 en Colombia
El Ministerio del Trabajo informó que no fue posible alcanzar un acuerdo entre trabajadores y gremios empresariales sobre el incremento del salario mínimo para 2026, luego de vencerse el primer plazo legal establecido en la Ley 278 de 1996.
La discusión se desarrolló en el marco de la Comisión de Concertación de Políticas Salariales y Laborales, escenario donde históricamente se busca un consenso entre las partes para definir el ajuste anual del salario mínimo en Colombia. Sin embargo, las posiciones se mantuvieron distantes.
El ministro del Trabajo, Antonio Sanguino Páez, confirmó que las organizaciones sindicales insistieron en iniciar la negociación con un aumento de dos dígitos, mientras que los empresarios reiteraron su propuesta de un incremento del 7,21%, lo que impidió avanzar hacia un acuerdo.
“Desafortunadamente tenemos que informarle al país que no hemos podido llegar a un acuerdo sobre el incremento del salario mínimo”, afirmó el ministro, al tiempo que explicó que la diferencia entre las posturas se convirtió en una “sin salida” en esta primera etapa del proceso.
Desacuerdo salarial abre nuevo escenario de negociación
Pese a la falta de consenso, el Gobierno abrió una nueva ventana para continuar el proceso. De acuerdo con el ministro Sanguino, las partes disponen ahora de 48 horas para presentar sus salvedades, las cuales serán evaluadas por el Ministerio del Trabajo.
Una vez analizadas, el Gobierno podrá habilitar espacios bilaterales entre los sectores involucrados. Este nuevo momento del proceso fue denominado por el ministro como un “segundo tiempo”, en el que se buscarán fórmulas de aproximación.
En este escenario, el presidente de la República tendría la posibilidad de intervenir directamente, una facultad que la ley permite cuando no se logra un acuerdo tripartito.
Los representantes de los trabajadores y del Comando Central Unitario señalaron que la falta de consenso abre la puerta para que el presidente Gustavo Petro defina un aumento cercano al 16%, como una forma de respaldar el poder adquisitivo de los trabajadores.
Un debate técnico, respetuoso y con amplia participación
El ministro Sanguino destacó que, más allá del desacuerdo, el proceso se desarrolló en un ambiente respetuoso, técnico y de altura, con la participación de entidades clave como la OIT, el DANE, el Departamento Nacional de Planeación, el Ministerio de Hacienda y el Banco de la República.
“Fue una discusión civilizada y muy cordial, donde cada parte defendió sus puntos de vista”, aseguró el jefe de la cartera laboral.
En paralelo a la sesión de la Comisión, se realizó la audiencia pública “Hablemos del salario mínimo 2026” en la Universidad Nacional, con la participación de más de 250 personas provenientes de distintos sectores sociales y regiones del país, incluyendo Bogotá, Cali, Cartagena e Ibagué.
Durante este espacio se abordaron temas clave como el concepto de salario vital, el impacto de las tasas de interés, y la necesidad de desindexar productos de la canasta familiar, aspectos que alimentarán el análisis del Gobierno en la etapa decisiva.
El mensaje final del Ejecutivo es claro: la discusión continúa, y el objetivo sigue siendo encontrar una salida que equilibre la sostenibilidad económica con el bienestar de las familias colombianas.
