Con un fuerte mensaje de unidad nacional, desarrollo rural y resiliencia, el presidente de Fedepalma, Nicolás Pérez Marulanda, instaló el 53° Congreso Nacional de Cultivadores de Palma de Aceite en Cali. El evento se desarrolla del 11 al 13 de junio en el Centro de Eventos Valle del Pacífico y reúne a más de mil asistentes del sector palmero colombiano.
En su discurso inaugural, Pérez Marulanda manifestó su solidaridad con las víctimas del reciente sismo en el oriente del país y los hechos de violencia en Cali. Además, realizó un llamado urgente al ELN para que liberen a Yenni Salazar Sabaleta, hija del palmicultor Juan Salazar, secuestrada desde el 21 de febrero.
Bajo el lema “Sembrando futuro, construyendo país”, el presidente de Fedepalma destacó los logros de la agroindustria palmera, desde su consolidación institucional y sostenibilidad, hasta las nuevas oportunidades en mercados como biocombustibles, alimentación animal y aceites diferenciados. Con más de 8.200 palmicultores, 233.000 empleos y presencia en 169 municipios, el sector representa el 10,5% del PIB agrícola del país.
La inversión del gremio en investigación supera los $887.000 millones, canalizados a través de la parafiscalidad, lo que ha permitido consolidar una agroindustria moderna, competitiva y sostenible.
En cuanto a inclusión, el gremio presentó avances importantes: mayor participación de pequeños y medianos productores y el lanzamiento de la Política Sectorial de Equidad de Género, que busca reducir brechas entre hombres y mujeres. Actualmente, el 32% de los productores son mujeres y el 17,5% del empleo directo es femenino.
En sostenibilidad, el 99% del área cultivada de palma en Colombia está libre de deforestación, según monitoreo en tiempo real. Además, 19 plantas están aprovechando biogás, evitando la emisión de 560 mil toneladas de CO₂ al año. También 369 productores ya están certificados bajo APSColombia, de los cuales el 65% son pequeños productores y el 34% mujeres.
En cuanto a innovación y diversificación, el sector palmero explora nuevas oportunidades:
• Biocombustibles sostenibles (SAF), con pilotos exitosos y certificación en curso ante la OACI.
• Alimentación animal, con estudios preliminares que muestran mejora en eficiencia productiva.
• Aceites diferenciados, especialmente del híbrido OxG, que ya representa el 20% del área sembrada.
Durante su intervención, Nicolás Pérez Marulanda fue enfático al señalar que “sin seguridad no hay campo posible”. Hizo un llamado al Gobierno Nacional para garantizar seguridad física y jurídica, asegurando que la falta de estas condiciones está frenando inversiones y afectando la confianza del sector rural.
Fedepalma también entregó un reconocimiento especial a Palmas del Cesar por sus 65 años de trayectoria, compromiso con la sostenibilidad y liderazgo territorial mediante un modelo asociativo con pequeños productores.
Al cierre de su intervención, Pérez Marulanda recordó que el sector palmero es mucho más que aceite:
“Somos un ecosistema de productores, trabajadores, empresas y comunidades. Si mantenemos la legalidad, la solidaridad y el compromiso, el futuro será más prometedor para el campo colombiano.”
El 53° Congreso Nacional de Palma de Aceite, organizado por Fedepalma y Cenipalma, incluye una muestra comercial con más de 50 empresas, así como una agenda académica de alto nivel que abordará los retos y oportunidades de esta agroindustria clave para el desarrollo rural de Colombia.

En Cali se instaló el 53° Congreso Nacional de Palma de Aceite. Fedepalma hizo un llamado a la unidad, al desarrollo rural y a la seguridad en el campo. Con avances en equidad, sostenibilidad e innovación, el sector reafirma su compromiso con el país. Más de mil asistentes participan del evento.